Kowalsky Web, atento a la demanda de sus visitantes que, aburridos con extensos panegíricos de centenas de palabras dejan de frecuentar el sitio, se actualiza hoy recogiendo un formidable material audiovisual digno de antología.
La televisión es hoy en día el medio de comunicación más potente en el mundo, seguido por la Internet, los mensajes de texto y las palomas mensajeras*. Aparecer algunos segundos dentro de la “caja boba” significa desenfundar unos cuantos billetes. Pero su alto y penetrante dominio sobre las masas vale mucho más.
La TV es un excelente elemento de persuasión, y de un segundo a otro, puede cambiar el destino de nuestras vidas. Esto hace que grandes genios del marketing y la publicidad decidan, a pesar de los altos costos, plasmar su creatividad en ella. Con sólo treinta segundos de magia televisiva, estarán aptos para ser recordados para el resto de la historia por sus innegables logros, algo que a genios del arte como Mozart o Van Gogh les llevó más de una vida alcanzar.
Así es que Kowalsky Web ya rememoró un sugestivo spot publicitario de excelente e impecable calaña como lo es el de Grappamiel Vesubio. A continuación se evocarán algunas piezas publicitarias de alta estimación. Actuaciones formidables, excepcionales tomas, planos artísticos al mejor estilo Kubrick, un vestuario que parece robado del Solís en temporada de óperas, inolvidables maquillajes y efectos especiales que avalan los enormes y avanzados logros tecnológicos de sus creadores, son el factor común de esta muestra propagandística. Todo ello, acompañado por unas impecables y seductoras voces en off que ponen broche de oro a estas fenomenales muestras de arte.
¡Escatológico y desmesurado, pero al mismo tiempo brillante! ¿Cómo poder explicarlo?
La televisión es hoy en día el medio de comunicación más potente en el mundo, seguido por la Internet, los mensajes de texto y las palomas mensajeras*. Aparecer algunos segundos dentro de la “caja boba” significa desenfundar unos cuantos billetes. Pero su alto y penetrante dominio sobre las masas vale mucho más.
La TV es un excelente elemento de persuasión, y de un segundo a otro, puede cambiar el destino de nuestras vidas. Esto hace que grandes genios del marketing y la publicidad decidan, a pesar de los altos costos, plasmar su creatividad en ella. Con sólo treinta segundos de magia televisiva, estarán aptos para ser recordados para el resto de la historia por sus innegables logros, algo que a genios del arte como Mozart o Van Gogh les llevó más de una vida alcanzar.
Así es que Kowalsky Web ya rememoró un sugestivo spot publicitario de excelente e impecable calaña como lo es el de Grappamiel Vesubio. A continuación se evocarán algunas piezas publicitarias de alta estimación. Actuaciones formidables, excepcionales tomas, planos artísticos al mejor estilo Kubrick, un vestuario que parece robado del Solís en temporada de óperas, inolvidables maquillajes y efectos especiales que avalan los enormes y avanzados logros tecnológicos de sus creadores, son el factor común de esta muestra propagandística. Todo ello, acompañado por unas impecables y seductoras voces en off que ponen broche de oro a estas fenomenales muestras de arte.
¡Escatológico y desmesurado, pero al mismo tiempo brillante! ¿Cómo poder explicarlo?
*Este dato podría no reflejar la realidad, pues no existen fuentes que lo confirmen más allá de Kowalsky Web.
3 comentarios:
1) la de batón: inolvidable. trabajo en un autoservice, y estoy pensando en colgar todos los batones y hacerlos oscilar ad infinitum. Creo q eso aumentaría enomemente las ventas.
2) plop!
3) mirinda pomelo?? me acuerdo del agua mirinda, pero de la pomelo... sí, capaz que sí.
Otro gran post de kowlasky que no termino de leer porque es muy lardo. Esto habla mal de mi, no del autor. Un cordial saludo andino para ti y tu familia, estimado Kowalsky.
Lardo = Largo en Resfriado
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