domingo, 7 de febrero de 2010

La lista

 

Los domingos me deprimen. En general es así, y no basta con una discusión entre Julio Ríos y Sergio Gorzy sobre el color del enchapado de plata que tenían unas cucharas de postre en un hotel de Barranquilla para levantarme el ánimo. 

Al momento sólo puedo compensar mi estado emocional componiendo semana a semana una lista de cosas que debería hacer en un futuro no muy lejano... No es algo voluntario, me pasa espontáneamente. En general intento retener mis ideas, pero hoy quiero compartir con ustedes lo que me he propuesto (no es joda).

 


- Conocer el barrio Gerli e ir a la esquina de Donovan y Camino Gral. Chamizo.

- Ir a Buenos Aires (para poder llegar a Gerli de forma más práctica)

- Tener un portón PPA

- Ser famoso y hacer una publicidad de PPA para que me lo instalen gratis

- Tocar a Pedro Saborido

- Peinarme

- Leer el libro de Larry David "Curb your enthusiasm"

- Aprender inglés para poder leer el libro mencionado

- Opinar sobre la obra de Borges y criticarla alegando que su único aporte a la literatura es haber hecho un divertimento del idioma en base a textos sin profundidad emocional y sólo en busca del Premio Nobel de Literatura

- Leer al menos un libro de Borges (en lo posible antes de opinar sobre él)

- Escribir un artículo en Wikipedia en lenguaje extremadamente coloquial (incluyendo insultos a Carmen Barbieri, entre otros)

 

Como meta propuse noviembre 2011, pero creo que no llego ni en pedo, porque estoy acumulando metas desde octubre de 1972.

 

jueves, 4 de febrero de 2010

Preguntas habituales sobre el rock II (*)

 

Ross Kilpman sigue contestando las dudas más frecuentes.

  

¿Puede un bajista o un baterista hacer un solo?

En principio digamos que sí, aunque con ciertas salvedades. El bajista puede hacer únicamente un solo en todo el recital, y allí deberá sacarle al bajo sonidos que parezcan de otro instrumento como para que la gente diga: “Uh, qué sonidos le saca al bajo”, y aplauda. De todos modos, el aplauso será siempre un “aplauso reconocimiento”, el mismo que en el fútbol se le brinda a un número cuatro, o a ese cinco batallador (...)

 

BAJO Y VOZ

Sobre el tema del sonido particular que se le puede sacar a un bajo, es digno de citar el caso de Nano Guttemberg, un apenas correcto músico, muy dúctil a la hora de sacarle sonidos al bajo. Nano podía hacer sonar su bajo como un cello, un saxo, tres armónicas y una gaita... ¡Todo a la vez! También lograba el efecto "subte frenando" o el de un gordo cayendo por una escalera, y realmente sorprendía imitando con su instrumento el timbre de la voz humana. En este caso, se destacaban las imitaciones de Menem, Alfonsin, Luis Sandrini y otros. La más lograda era la de Jorge Corona, a quien imitaba en un solo contando con el bajo un chiste sobre una señora que iba a la carnicería y pedía una morcilla. Nano dejó la música y se dedicó al varieté, triunfando en Centroamérica con su número "El bajo de las mil voces".

 

(*) Extraido del libro "Peter Capusotto, el libro" de Diego Capusotto y Pedro Saborido. Hasta lo que voy, creo que ha sido la ocurrencias que me resultó más graciosa, junto con la de la supuesta ópera rock "El día que amaneció un perro" que relataba la historia de un pueblo que obervó un día que en vez de amanecer el sol por el horizonte, se asoma un enorme perro. La obra planteaba una metáfora acerca de la condición humana, cuando los habitantes del pueblo buscan la forma de deshacerse de las heces fecales de semejante animal (que adquieren las proporciones de un ómnibus de la empresa Chevallier).